Una nueve sencilla y fantastica poesia que habla de las mujeres andaluzas que trabajan en la recogide de la aceituna................ sencillas y honrradas...........
	Jose Luis
	 
	Arbolé, arbolé
	seco y verdé.
	La niña del bello rostro
	está cogiendo aceituna.
	El viento, galán de torres,
	la prende por la cintura.
	Pasaron cuatro jinetes
	sobre jacas andaluzas
	con trajes de azul y verde,
	con largas capas oscuras.
	«Vente a Córdoba, muchacha».
	La niña no los escucha.
	Pasaron tres torerillos
	delgaditos de cintura,
	con trajes color naranja
	y espadas de plata antigua.
	«Vente a Sevilla, muchacha».
	La niña no los escucha.
	Cuando la tarde se puso
	morada, con luz difusa,
	pasó un joven que llevaba
	rosas y mirtos de luna.
	«Vente a Granada, muchacha».
	Y la niña no lo escucha.
	La niña del bello rostro
	sigue cogiendo aceituna,
	con el brazo gris del viento
	ceñido por la cintura.
	Arbolé arbolé
	seco y verdé.